Epifanía muy precoz.-

“EᑎTOᑎᑕEᔕ ᗰE ᗪIᔕᑭᑌᔕE ᗩ ᖇEGᖇEᔕᗩᖇ, Eᒪ ᔕEᑎᗪEᖇO Yᗩ EᔕTᗩᗷᗩ ᗷᒪᗩᑎᑕO Y ᗰIᔕ ᑭᗩᔕOᔕ ᖇEᔕOᑎᗩᗷᗩᑎ ᗪE ᗰᗩᑎEᖇᗩ ᗪIᖴEᖇEᑎTE”.

Anima mundi. Susanna Tamaro.

El mundo y sus simplezas. Formas de observar:

- El investigador percibe el detalle.

- El pensador lo interpreta.

- El artista se recrea en él.

- El músico lo decora.

- El médico aprende a curarlo.

- La madre lo protege.

- El niño juega con él.

En mi fuero interno me gustaría ser todo a la vez: Investigador, músico, pensador, artista, médico, madre y niño. Y cocinarlo, comerlo, cantarlo, estudiarlo y guardarlo a buen recaudo para preservarlo de los indeseables.

Mientras tanto me conformo con dormir la siesta del Sábado plácidamente, que ya es mucho para mí.

Espejismos y bulerías.-

He caminado unas doce veces por el pasillo de mi casa infantil entre las 21.30 y la 1.00. A veces con platos, a veces con vasos y a veces con excusas. Los platos decorados con flores sufriendo el golpeteo enérgico de los cubiertos a modo de baquetas, los vasos soplados industrialmente simulando pechos de palomos madrileños luciéndose en su bailoteo cervical ánteroposterior con cierta compulsa, y las excusas simples, sólo para salir del paso.

Y es que las realidades cambian de segundo en segundo, y lo que en un principio se mostraba soso hacíase salado al encender la luz del segundo ángulo recto, a la altura del repostero, para que el caballero y su corcel, en lugar de dirigirse al torneo decidieran reunirse conmigo en la cocina y poner en marcha el lavavajillas. 

Y así, entre plato y plato, entre copa y vaso, y entre villancico y tambor dieron las doce en punto. Y dejó de protagonizar la fregoncilla.

Y nació el Niño Jesús en nuestro belén también, como todos los años. Y mi madre aguantó con nostalgia el tirón, porque recordar te hace persona pero resulta complicado. 

Y musitando entre dientes el Noche de Paz acabé por entender el misterio de la Navidad. Y fui feliz un instante, aquel en el que los pensamientos y las ilusiones viajaron juntos para respirar, y aunque ya habíamos recogido el hule, lo quise limpiar para guardarlo y lo saqué de nuevo para frotarlo a la luz.

NOTA SALEROSA de CASA: ¿Estamos a Belén Pastores o estamos a lo que estamos?

La acuarela es un regalo precioso de Julia, que dice que se inspira en mis fotos.-